¿Para qué sirve la Avena?
Durante muchos años la avena no fue un alimento muy popular, en realidad se consideraba una comida de las clases bajas. Hoy en día, la avena es percibida como un alimento excelente para la salud.
La avena tiene muchos beneficios tanto como alimento como en cuestión de belleza. Vamos a ver algunos de los tantos beneficios en ambos casos y formas de usarla.
La avena contiene una alta cantidad de fibra, la cual ayuda a la digestión y aporta muchos más beneficios.
Una de las propiedades de la avena es el calcio que ayuda a fortalecer huesos y dientes.
La avena posee una gran cantidad de vitaminas y minerales. La avena también contiene muchas proteínas.
El hecho de consumir diariamente 3 g de la fibra que contiene la avena, reduce el riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares hasta en un 40%.
Uno de los beneficios de la avena es que prácticamente no contiene grasa.
El salvado de avena, que se refiere a la cáscara exterior de la planta, posee características que disminuyen los niveles de colesterol malo.
El agua de avena es uno de los mejores aliados a la hora de hacer dieta, perder peso y eliminar todas las toxinas que nuestro cuerpo va generando y almacenando. Es una fuente importantísima de proteínas, vitaminas y minerales además de oligoelementos. Si el agua de avena se toma en ayunas ayuda a bajar de peso, ya que nos saciará toda la mañana y no sentiremos la necesidad de comer mucho. Lo ideal es tomar un vaso de agua de avena en ayunas diario por un mes.
Forma de preparar el agua de avena: Para preparar 3 litros de agua necesitas una taza de avena, 1 trozo de canela y dos cucharadas del sustituto de azúcar de tu preferencia. Pones un poco de agua en la licuadora con la taza de avena, lo licuas muy bien y agregas el resto del agua junto con la canela y el azúcar y vuelves a licuar para que todo quede bien incorporado. Lo vacías a una jarra y depende de si te gusta con los trocitos de avena tal cual la dejas, pero si te es desagradable sentir la sensación en la boca, mejor cuélala y refrigérala para tener lista tu agua por la mañana.
En cuestión de belleza, la avena la podemos utilizar para muchas cosas, como para exfoliar, para blanquear, hidratar, nutrirla, controlar el exceso de grasa, etc.
Si tu piel es seca y deseas hidratarla y nutrirla la siguiente solución es para ti. Mezcla 3 cucharadas de hojuelas de avena con 1/4 de taza de leche. Deja que las hojuelas de avena se hidraten en el líquido por cerca de 10 minutos, el resultado debe ser una capa con cierto espesor. Aplícala en tu rostro con suaves movimientos circulares, siempre hacia arriba masajeando mientras estimulas la circulación. Deja actuar por 15 minutos y luego retira con agua fría para favorecer el cierre de los poros.
Si tu piel es grasa y lo que quieres es controlarla entonces mezcla 3 cucharadas de avena y en vez de la leche remplaza por 1/4 de taza de agua, los resultados serán sin aumentar la producción de grasa en tu cutis.
La siguiente mascarilla ayudará a exfoliar tu cutis. Mezcla 4 cucharadas de avena con 1/3 de agua caliente (asegúrate de que no queme tu piel) y permite que las hojuelas absorban un poco el líquido durante algunos minutos. Luego añade 2 cucharadas de yogurt natural, 2 cucharadas de miel y una clara de huevo ligeramente batida. Aplica esta mezcla y deja en tu rostro por 15 minutos, al retirar con agua fría los resultados te sorprenderán. La exfoliación es un tratamiento de belleza muy sencillo pero necesario para nuestra piel y es que ayuda a eliminar las células muertas acumuladas, dando como resultado un rostro más liso y terso.
Si lo que estás buscando para tu rostro es una exfoliación intensa, vida, brillo y además nutrir con vitamina C entonces mezcla 3 cucharadas de avena, 1 cucharada de azúcar, 2 cucharadas de miel y el jugo de media naranja. Aplícala en tu rostro recién lavado y seco. Déjala por 15 minutos y retira con agua fría y verás la diferencia.
Si combinamos la avena con otros elementos -por ejemplo la miel, el yogurt, jugo de limón, agua, aceite de árbol de té, vinagre blanco- obtendremos una mascarilla con diferentes propiedades para nuestra piel, que usada regularmente -una vez a la semana- nos permitirá mejorar el aspecto de nuestra piel notablemente. Simplemente deja reposar las hojuelas en cualquiera de estos ingredientes y obtendrás una mascarilla lista para usar.
Atrévete a utilizar la avena tanto como alimento o para mascarillas, nunca te vas a arrepentir de esta excelente planta herbácea.
